Ni la Consejería de Educación ni el centro educativo han respondido a la solicitud formal realizada hace más de tres meses para que pueda usar el español en clase.
“Ponen la conservación de una lengua por encima de los derechos y el bienestar de los niños”, afirma Gloria Lago, presidente de Hablamos Español.
20-01-22
La madre de un niño con síndrome de Down denuncia la situación que vive su hijo en el colegio de Infantil y Primaria Pablo Neruda, de Valencia. “No entiende nada en clase porque todo está en valenciano”, afirma su madre. El niño sufre un “trastorno importante del lenguaje”, según consta en el informe del logopeda, quien recomienda el uso del español en el colegio.
“Muestra un retraso psicolingüístico importante, situándose significativamente por debajo de su edad cronológica. Para ir supliendo estas carencias e intentar que el niño sea oral, sería recomendable que todo el entorno que rodea al niño le hablase en un único idioma. De ese modo evitaríamos la confusión generada por la mezcla de términos entre los diferentes idiomas. Teniendo en cuenta que su lengua materna es el castellano, sería recomendable que en casa, colegio y terapias que reciba, se utilice el castellano.”(Extracto del informe del logopeda)
El pasado 5 de octubre, esta madre, asesorada por Hablamos Español, presentó un escrito a la Consejería de Educación para solicitar que su hijo pudiese usar el español en sus actividades académicas y utilizar material didáctico en español, excepto en las materias denominadas lingüísticas.
Han pasado ya más de tres meses desde que hizo esta petición formal y todavía no ha obtenido ninguna respuesta, ni por parte de la Consejería de Educación, ni del centro educativo. Es más, los responsables del centro educativo alegan que ni siquiera tenían conocimiento de esta petición formal.
Mientras se espera una respuesta que no llega, el menor, con una discapacidad del 33% reconocida desde hace más de dos años, tiene que seguir cursando segundo ciclo de Educación Infantil con el valenciano como lengua vehicular. “No entiendo que se empeñen en añadirle más dificultades a un niño que ya las tiene”, explica su madre angustiada, “Solo hay un par de cuentos en español, el resto del material está en valenciano. Las tareas con números y las que tienen con vocabulario, por ejemplo, con las partes del cuerpo, también las trae en valenciano”.
Gloria Lago, Presidente de Hablamos Español recuerda que “es una aberración negarle a un niño la enseñanza en lengua materna. Si además el niño tiene necesidades educativas especiales, entramos en el campo de la crueldad. La familia ha aportado el informe realizado por un logopeda que recomienda claramente que «en casa, colegio y terapias que reciba, se utilice el castellano». Ponen la conservación de una lengua por encima de los derechos y el bienestar de los niños y encima pretenden decir que es por su bien.”
Hablamos Español habló con el centro para intentar solucionar la situación de este alumno, pero la respuesta fue que los niños al final se adaptan y que estudiar así es una riqueza.